domingo, 31 de julio de 2011

Love is in the air

Correr. Correr para todo el mundo. Y que nadie camine contigo. Andar, y ver gente en los colindes, pero saber que andas sola.

Las palabras, el viento se las lleva. Y da lo mismo que sean promesas, razones o escusas. La comprensión, como la confianza, se gana. Y es una goma. Tirar y tirar de ella, hace que te de en las narices de nuevo.

Y esos límites tan hablados, están, con todos. Unos tienen unos, otros tienen otros. Pero cuando diferentes límites de diferentes personas rebasan todos a la vez, hace que tu llegues al límite.

Sobretodo cuando éstos atacan directamente a cicatrices. Cuando revives situaciones, y vives el sentirte stúpidamente estúpida.

Y todo hace Dash Boom Kaboom. Por más que tú hagas Goupichiflou. Y esa rabia interna que habias conseguido calmar bulle en tu interior y te revive la llama de los impulsos.

Impulsos de rebentar cosas, de gritar, de escupir (que no decir) cosas en la puta cara. Porque una, es calmada, aguanta y siempre tiene buenas formas y buena cara. Hasta que la toman por estúpida. Hasta que nadie se para un segundo a pensar que es humana. Total, siempre lo ha aguantado, siempre lo ha hecho, ¿Por qué ahora va a ser diferente?

Y entonces es cuando entran ganas de rebentar, de escupir todo, como sea, soltando las cosas como salen y nacen, sin pensar en como sentará al de delante. Por una vez, pensar en mi antes que en cualquiera.

Y tengo para todos. Porque parece que hablar no sirve de una mierda. Entra por una oreja y sale por la otra. Y mientras tanto, yo sot la comprensiva, la que va avisando, diciendo "no es con ánimo de molestar, es para que lo sepas, seas consciente y actúes en consecuencia". Pues si te avisan, y te la sopla, luego las consecuencias son éstas.

Y falta poco para que el globo rebiente. Así que por el momento, voy a hacer introspección, sola, para rebajarlo y acotar los límites de todos.

Para que esto, no vuelva a suceder.

sábado, 14 de mayo de 2011

Colega, ¿Karma?

Colega, ¿Dónde está mi karma?

martes, 22 de marzo de 2011

Energy power system!

Y hoy... tengo un subidón del copón.

Hace ya tres días que estoy en modo a full tope the power torbellino. He vuelto a mi modo hiperactivo y con las cosas claras. Estoy con la casa a tope. Medio obligada por fecha límite porque se acerca una semana en que podré colgar en la puerta un cartel como los hoteles de "completo" y porque ya me había puesto yo también esa meta.

Porque hoy empiezan a llegar los nuevos inquilinos. Es lo que tiene un gp. Y yo, súper feliz de la muerte y encantada de tener la casa llena y los niños correteando por la casa. Y porque voy a ver a mucha gente que hace mucho que no veo y que tengo muchas ganas de ver.

Pero este viernes hubo fiestón, y ese bailoteo que llevaba 4 años detrás de él me ha dado un subidón de energía que lo flipas. Y así sigo, con los cascos a tope, bailando y cantando a grito pelao por la casa mientras la recojo.

Y esta semana pasaran 4 amigos por casa, y este finde, seremos 13 entre personas y gatos.

Y yo, hoy... Tengo un subidón de energía que lo flipas....

Ángel de Amor

Canción de Maná.

"¿Quién te cortó las alas, mi ángel?
¿Quién te arrancó los sueños hoy?

¿Quién te arrodilló para humillarte?
¿Y quién enjaló tu alma, amor?



Déjame curarte vida,
Déjame darte todo mi amor.

Ángel...
Ángel, ángel de amor.
No te abandones,
no te derrumbes, amor.



¿Quién ató tus manos, ató el deseo?
¿Quién mató tu risa, mató tu dios?
¿Quién sangró tus labios y tu credo?
¡¿Por qué lo permitiste, ángel de amor?

Déjame curarte vida,
Déjame darte todo mi amor.

Ángel...
Ángel, ángel de amor.
No te abandones,
no te derrumbes, amor.

Ángel...
Ángel, ángel, te doy mi amor.

Abre tus alas,
deja tus sueños volar.




Ángel...
somos arena y mar.
No te abandones,
no te derrumbes, amor.



Ángel...
Ángel, ángel te doy mi amor.
Abre tus alas,
deja tus sueños volar...

Ángel de amor...
Pero mi amor ya nunca te derrumbes.

Ángel de amor...
Pero mi amor ya nunca te derrumbes.

Ángel de amor...
Pero mi amor ya nunca te derrumbes.

Ángel de amor...
Pero mi amor ya nunca te derrumbes."


lunes, 21 de marzo de 2011

Tú me salvaste del infierno




Canción de Maná

"Eso es, he tocado fondo,
y no sé como salir
desde el abismo...

Tengo el alma destrozada,
siento que no puedo seguir.
Estoy perdido...

Tú me salvaste del infierno
volví a nacer
cuando no creía en nada...
Volví a creer.

Sanarás mi pesar,
tu amor lo va vencer.
Tú me salvaste del infierno....



Alterados mis sentidos,
no recuerdo que es reír...
No soy el mismo.

Deprimido, confundido,
no quedan ganas de vivir.
¿Por qué Dios mío?

Tú me salvaste del infierno,
volví a nacer.
Cuando no creía en nada,
volví a creer...

Sanarás mi pesar,
tu amor lo va vencer.

Tú me salvaste del infierno....



Gracias por llegar a mi,
gracias por estar, aquí.
Yo juré que era mi fin.

Gracias por amarme, así
gracias por estar, aquí.
No sé que haría sin ti.

Tú me salvaste del infierno,
volví a nacer.
Cuando no creía en nadie,
me hiciste creer.

Sanarás mi pesar,
tu amor lo va a vencer.
Tú me salvaste del infierno,
sólo tú puedes ser.

Salvarme...

Me salvaste del infierno,
volví a nacer.
Cuando no creía en nada
volvi a creer.

Sanarás mi pesar,
tu amor lo va a vencer...

Tú me salvaste del infierno..."

miércoles, 16 de marzo de 2011

Karma

Conversaciones... Que me hacen dar cuenta de cosas...



Siempre me he tenido en poca consideración, baja autoestima. Y también siempre he creído en algún tipo de karma. No un karma como creen los indios, de lo que hagas en esta vida serás compensado-castigado en la próxima. Sino en algún tipo de karma en la vida actual. Me cuesta creer en un mundo en que las buenas acciones no son recompensadas de alguna forma y las malas acciones no son castigadas de alguna forma. No con grandes cosas, con pequeñas que joden a uno en concreto. Como un tirón en la pierna cuando te quieres levantar después de haber estado tocando las narices y estirado en la cama mientras ves a otro recoger :P O como ser una mala persona y perder la plaza por la que llevas dos años peleándote por ella y perderla cuando sólo te faltan dos personas por cogerla y que la coja el de delante. A otra persona no le habría jodido, pero a ti en concreto, te jode muchísimo.



Creer en ese karma a veces te desespera. La vida sólo te da palos, y piensas, "porqué, si soy buena con la gente, si intento no dañar. Porque siempre me hieren, porque siempre me joden, porque nunca consigo que las cosas me salgan bien por más empeño que le ponga".



Y luego, el karma te compensa. Llega una persona, con sus defectos, con sus virtudes. Persona. Que te da y no espera. Que te pide pero no te exige. Que te quiere y te lo demuestra. Que es dulce y cariñoso, y que es pasional cuando toca. Que te respeta y comprende. Que te apoya. Que cree en ti y que te ayuda a creer en ti cuando tú dejas de hacerlo. Por supuesto no es perfecto. Tiene sus defectos. Como todos. Pero los compensa. Pero te pide perdón cuando cree que ha hecho una cosa mal, o cuando se da cuenta que algo te ha molestado. Que te pide que le avises antes la próxima vez porque no quiere herirte ni hacerte daño ni molestarte.





Y piensas, porqué. Porque yo. Hay chicas más guapas, simpáticas e inteligentes que yo. ¿Porque he tenido la tremenda suerte de que quiera estar a mi lado? Sé que por karma me lo merezco, que después de toda la mierda que he aguantado, por compensar, me lo merezco. No a él en concreto, sino alguien bueno. Pero él... Me quiso a mi. Ha querido compartir su vida conmigo. ¿Porqué a mi? ¿Porqué no cualquier otra?



Y siento que me convierto en una pesada, porque no paro de decirle que me siento muy afortunada de tenerlo a mi lado, de que me quiera, y que cada día que pasa lo quiero más. Pero siento que tengo que decírselo, que tengo que decirlo, que necesito expresarlo y expresárselo.



Pero me siento feliz. Feliz de vivir, feliz de vivir la vida contigo, feliz de ser feliz. Con todas las pequeñas cosas. Y con todas las grandes cosas. Feliz exista el karma o no. Porque soy kawaii, y contigo, mi vida es más kawaii si cabe ^^




"Te quiero. Cada día que pasa te quiero más. Y cada día que pasa me alegro más, si cabe, de que hayas aparecido en mi vida. Y todavía no se porque suerte, decidiste compartir la tuya conmigo.... Me siento muy afortunada. Y sé que soy pesada diciéndotelo tanto... Pero lo siento.... Y siento que tengo que decírtelo..."

miércoles, 16 de febrero de 2011

Contradicciones




Cada vida está llena de contradicciones. Cada uno de nosotros lo está. Por no ser coherentes, somos incoherentes hasta con nosotros mismos.



Yo, soy una hiperactiva muy vaga. Soy una obsesa de la organización muy caótica y desastre. Soy una extrovertida muy tímida. Una parlanchina que se calla cuando tiene que hablar. Una gritona que susurra cuando se enfada. Me gusta ir al grano, pero me voy por las ramas. Una romántica que no le gustan las moñerías. Que no le gustan las moñerías pero que considera moñerías tonterías y le gusta que se las hagan. Y sino, se molesta. Me gustan las tecnologías pero prefiero una libreta y un boli y la agenda de toda la vida. Me gustan las maquinas de la cocina pero me encanta trabajar la comida y hacerla a fuego lento y ver fermentar un pan. Soy una miedosa pero me lío la manta a la cabeza y hago las cosas. Me gusta lo convencional y lo que sé que es seguro, porque lo diferente me asusta, pero a la vez me gusta probar cosas nuevas y no quedarme con la duda de si me hubiera gustado lo nuevo por tonta miedosa de no probarlo.



Estas son mis contradicciones, pero a la vez, las que me hacen ser quien soy. Las que me hacen frustrar cuando hago una cosa porque sé que también soy lo contrario.

Porque las frustraciones no dejan de ser miedos. Y me aterra quedarme inmóvil, y me aterra quedarme con la duda. Luego vienen los arrepentimientos. "No debería haberlo hecho porque yo soy así o asá" Pero también soy lo contrario. Unas veces la balanza se cae hacia un lado, y otras hacia el contrario.

Porque somos un cúmulo de cosas, de situaciones. Nos mueven distintas sensaciones y emociones. Esos son nuestros detonantes.

Porque... ¿quién somos en realidad?

lunes, 14 de febrero de 2011

A tope de power, loqui!





Tengo que dejar de ver princesas de barrio, ya lo dice mi padre... xD

Hoy me he levantado, San Valentín. Primer San Valentín que me levanto con la persona a la que quiero y que quiero celebrarlo. Donde "celebrarlo" es simplemente éste levantar con él. Hasta aquí la moñería xD Porque en realidad hemos "celebrado" el San Valentín este fin de semana, siendo éste la excusa para hacer un regalo (que si no hubiera habido San Valentín hubiera hecho igual) y pasarnos el fin de semana jugando a las magicas con los nuevos macitos que tanto coñazo me ha dado para conseguir (Le estoy cogiendo el gustillo a esto de los planeswalkers y al Tezzeret en concreto). Lo importante de esto no es que hoy sea San Valentín, sino la noticia que me han dado cuando aún estaba cogiendo fuerzas para levantarme. Primera llamada de mi jefe desde que estoy trabajando en que no es para echarme la bronca o para encontrar algo. Dos días a jornada completa, y si todo va bien estos dos días, en dos semanas empiezo a trabajar a jornada completa con cambio de contrato inclosed. ¡¡¡Yuju!!! ¡La paciencia tiene premio! Cuando ya empezaba a plantearme no aguantar más las promesas vacías en el tiempo, en un tiempo indefinido en el tiempo y que ya no podía aguantar más porque la situación no se podía sostener más... ¡toma ya! ¡A tope de power! Ya me he levantado con energias (y sí, mi amor, el irme despertando y cada vez que me despertaba te ganaba más da más energias también, pa qué negarlo xD)

En otro orden de cosas, y solapándose (pero por partes, como dijo Jack el Destripador) sigo matriculada y metiéndole caña al ciclo formativo. Este semestre cinco asignaturas. Que si con tres ya iba de culo y estresándome, no quiero imaginármelo con cinco. Por suerte, dos son "repes", no aprobadas, pero que me suenan y que ya he hecho prácticas, así que "algo" me suena y serán como llevar cuatro asignaturas simultáneamente. Pero ahí viene el "solapándose". Tres asignaturas con un curro a media jornada y estresándome, ya me veía muerta con cinco asignaturas (cuatro si hacemos la pirula mental de "son repes") a media jornada... Sólo de pensar que tendré la mitad de tiempo para currármelas porque trabajaré el doble... ¡Diox! Pero ahora mismo, con el subidón de energía, me veo con poder para ganarle a todo.

Y en mente, tengo ya la organización de la casa, dónde quiero cada cosa y cómo las quiero. Y ya he empezado a ponerme a que todo quede así. Porque lo más chungo es conseguir que todo esté bien, mantener no cuesta tanto. Pero lo que sí que cuesta un mundo es ponerse a modo ciclón para que todo quede como quiero, en un tiempo limitado (luego ya empiezo a estudiar por las mañanas otra vez y tiene que estar todo ya en orden, porque no tendré tiempo, y porque quiero que todo esté en orden para tener mi espacio para concentrarme y poder trabajar sin que me de el dolor de espalda crónico que tengo) Y porque sí, cariño, tienes razón, pero necesito hacerlo yo y organizarme, no puedo hacer cosas sin hacer otras antes, porque siguen un orden, aunque tú no lo veas o creas que es por dejadez.



Pero de repente tengo un subidón de energía que no me lo aguanto. Así que lo primero actualizar esto, que se lo debía a una personita que me edulcora la vida, quede con ella o no, porque me lo debía a mi misma, y porque que coño, tengo cosas que decir y decirme, y me apetecía. Y en cuanto acabe, me pongo en modo ciclón (hay que aprovechar xD) con la casa.

Una casa que cada día que pasa me gusta más. Sigo odiando sus esquinas "no-ángulo-recto" pero la vida que tiene me gusta más. Me encanta que seamos 6 (y la familia va en augmento), los domingos por la mañana, los gatos ronroneando cuando estoy en el sofá, los "¡como que los gatos ahora tienen dos padres!", los bollos por sorpresa de algunas mañanas, las comidas para 4, los sofás para dos en que no estoy yo (pero que me encanta ver, o saber que están aunque no lo vea :P), las pizarras con notitas...
Aunque se rompan cosas, aunque hayan discusiones de convivencia. Porque es la primera vez que convivo que con mi compañero de piso, que convivo, hacemos vida juntos (no es un compañero de piso y yasta) y con el que me gusta convivir. Porque la convivencia es dura, pero me gusta. Porque me gusta estar ahí si me necesita. Porque me gusta que esté ahí si lo necesito. Porque me gusta que me despiertes y me mandes a la cama. Porque me gustan los cafés con leche. Porque me gusta dormir contigo y cuando cada uno usa su habitación. Porque me gusta saber que me puedo colgar y contar contigo. Pero eso es otro post para otro día.



Mi vida cada vez me gusta más. Mi vida veo que toma sentido. Y un sentido que me gusta. Veo un futuro, y no sólo mío. Pese a lo que pase inesperado. Y no la puñetera inercia en que siempre la sumo. Aunque coja rutinas nuevas, estas las cojo yo, y me gustan. Y muchos proyectos en mente que ahora sé que, no todos, pero muchos se cumplirán.



La minicadena ya está en el comedor. Y ya está sonando Maná a toda leche. Es el momento de acabar de organizar y de dejar que las cosas fluyan, que el agua corra... Y que todo siga así, éste camino sí.

Goupichiflou.